Un matrimonio se instala en una antigua torre en la costa. Allí empiezan a suceder cosas extrañas, hasta que tres piratas vuelven del mundo de los muertos...


Banda sonora de género que el compositor desarrolla en tres ámbitos: en primer lugar músicas para recrear ambientes de misterio, nebulosos, que son deliberadamente imprecisos e indefinidos. En este contexto aparecen las otras dos clases de música: aquellas aplicadas a los personajes protagonistas y la que acompaña a los fantasmas. Ambas tienen puntos de conexión que las asemejan, especialmente por su tono melancólico y moderadamente afligido, más desesperado en el caso de los piratas fantasmas. Es destacable la participación de una soprano para aportar un lirismo romántico roto, quebrado, que en ocasiones toma la forma de llamadas pidiendo auxilio, en otras es siniestro y también hay ocasión para la liberación. Todo ello, con algunos temas para el énfasis de la acción, cariz gótico en su conjunto y, aunque hay cierta debilidad en su estructura, resulta en una banda sonora con muchos elementos interesantes, aunque seriamente perjudicada por su desproporcionada aplicación.