Cortometraje sobre el empeño de una niña y su abuelo por devolver el agua a un cauce seco, en pleno desierto californiano.
El compositor aplica una sencilla y emotiva creación que enfatiza el anhelo de la protagonista por alcanzar su logro, y también significa la bondad del mismo. Un motivo musical, también desarrollado como tema, es el eje sobre el que estructura el conjunto de este trabajo. Se acompaña de Altamira, el origen del arte (18)