Secuela de Nanny McPhee (05), en la que la protagonista se presta a ayudar a una joven madre que intenta llevar la granja mientras su marido está en la guerra y sus hijos no paran de hacer travesuras.
El compositor desarrolla una eficiente creación sinfónica cuyo propósito es el de realzar lo cómico y recrear un ambiente mágico. Lo hace en base a un tema principal picaresco y un tema central de tono bucólico, que utiliza con cierta frecuencia. Ambos temas son complementados por otros ambientales. Se trata de una banda sonora que, aunque no es especialmente sofisticada, cumple eficientemente sus pretensiones, si bien no supera la que escribiera Patrick Doyle para el anterior filme.