Drama ambientado en la Inglaterra de mediados del XIX, en el que un naturalista invitado por un hombre a vivir en su mansión se casa con la hija de su anfitrión, descubriendo a partir de ese momento un mundo de perversión.
Refinada y elaborada creación que recoge algunos elementos característicos de la música minimalista, pero con un tono muy clásico. Sobresale por el empleo de instrumentos de cuerda y por su emotivo sentido dramático.