Tres hermanas se reúnen en la casa familiar y en el encuentro surgen los conflictos acumulados durante tiempo: una actriz quemada, una mujer acusada del asesinato de su marido, y una reprimida sexual.
Bellísima creación, llena de delicadeza y alegría, con un tema principal conducido por el saxo y otras melodías en las que el piano es el instrumento más destacado. Todo, para recrear un ambiente de eterna calma y paz, que contrasta con el drama del argumento, y para desteatralizar el filme, que se beneficia considerablemente con la labor del compositor francés.