Serie televisiva. Tras la muerte del patriarca de los Guinness, sus cuatro hijos, cada uno con oscuros secretos que ocultar, tienen en sus manos el destino de la cervecería.


En la serie coexisten numerosas canciones de artistas irlandeses contemporáneos (entre otros Fontaines D.C., Kneecap o The Mary Wallopers) con música original que saca partido del folclore escocés con un tono radical y enérgico. También hay temas más convencionales, para lo ambiental, pero se destacan aquellos momentos que se aplican para enfatizar la tensión y la energía de las acciones. La fusión del folk, rock, temas tradicionales y otros estilos rompe la monotonía sonora y aunque no es realmente una banda sonora arriesgada sí evita los convencionalismos.