El compositor firma una extensa y suntuosa banda sonora para lo épico, la acción y también lo lírico. Saca máximo provecho de la música e instrumentación étnica, que emplea no solo con propósitos folclóricos, localistas o ambientales, sino con una interesante dinámica dramática en la que tiene protagonismo, obviamente, el notable tema principal que es del personaje protagonista y con el que se explica tanto su fortaleza y determinación como sus emociones, e incluso sirve para dotarla de un aura mística y legendaria, pues es un tema musical que también se expande y es empleado en incontables ocasiones, muchas de ellas como referencia y otras para darle mayor dinmensión al persoaje. Hay muchas otras músicas que son para escenas de batallas y para otras secuencias, pero todas ellas dentro de una sólida unidad de criterio estilístico. Sin embargo, no existe un contrapunto musical claro con los hunos y sus dos principales cabecillas, que quedan así algo desdibujados, lo que resta intensidad dramática. Incluye algunas breves referencias a la música del filme animado.