Unas extrañas personas se instalan en un tranquilo vecindario. Pero los vecinos empiezan a sospechar de ellos, y las cosas se complican cuando un anciano del lugar desaparece.
Divertida y animada partitura, en la que el compositor se autoparodia deliberadamente, con intenciones humorísticas. Arranca con un tema a órgano que deriva en el tema principal y que prosigue luego con otras melodías con las que describe a algunos de los personajes del filme.