Durante la Segunda Guerra Mundial, más de ochocientas mujeres se unieron a la guerra para solucionar el retraso de tres años de correo no entregado. Ante a la discriminación y en un país devastado por la guerra, consiguieron clasificar antes de tiempo más de diecisiete millones de piezas de correo.


La banda sonora juega la baza de lo melodramático sin disimulo, con excesos en su edulcoramiento y en lo enfático tanto para lo patriótico como para la gesta de las mujeres. Cuenta con un bello tema principal y es notable en lo musical en su conjunto, pero sobrecarga el filme con unas cantidades no realmente necesarias de azúcar.